Alba (2021)
Lana de Nueva Zelanda, algodón, pigmentos naturales
Prototipo de Alba (2020)
Lana Lincoln, algodón, y colorantes sintéticos
Tejido fino en telar de pedal
Colección Bi Yuu
Concebida durante la pandemia del Covid-19, el diseño de Alba, la primera colección de tapices del estudio, se inspiró en las formas y colores del amanecer, un pequeño gesto de alegría como símbolo del final de un periodo desafiante.
En un momento en que la humanidad retornó al hogar como espacio de refugio, el auge del interiorismo demostró que el diseño cumple un rol social, fortaleciendo los lazos entre familia y el sentido de pertenencia a un espacio. Adaptándose a los retos y restricciones de la pandemia, el estudio creó una herramienta digital para personalizar la colección en línea, permitiendo a los usuarios integrarse en el proceso creativo y experimentar con el color. Siendo una colección de tapices, Alba fue diseñada para telares pequeños, pensando en reactivar la participación de las mujeres artesanas de Teotitlán del Valle en el proceso de tejido.
Durante la pandemia del Covid-19 la industria mexicana que produce los pigmentos industriales para Bi Yuu cerró inesperadamente, razón por la cual las piezas que se realizaron durante ese periodo, incluyendo Alba, se tiñeron con diversas mermas, o pigmentos disponibles, naturales o sintéticos.
Escucha las reflexiones de la artesana Paola Mendoza Sosa.
Contemplari (2023)
Lana de Nueva Zelanda, algodón, hilo de cobre, pigmento de residuo de aguacate
Bastidor de madera de maple
Tejido fino en telar de pedal
Colección Bi Yuu
Contemplari es la primera colección teñida con residuos orgánicos. La colaboración con el restaurante Los Danzantes, que provee las cáscaras y semillas frescas de aguacate, genera una cadena de producción circular en la que los desechos de un establecimiento se reutilizan en otro para crear productos de alta calidad y sofisticación, un proceso conocido como upcycling. Las cáscaras y semillas producen tonos rosas y beige; la adición de pericón, por sugerencia del equipo de Teotitlán, produce verdes y mostazas. Meses de experimentación en el estudio de Ciudad de México precedieron al desarrollo de la paleta de color, en los cuales las diseñadoras exploraron la mejor técnica para teñir con productos orgánicos y rápidamente degradables. Haciendo eco del uso de productos naturales para el teñido, el diseño de la colección está inspirado en la relación entre el ser humano y la naturaleza y en la experiencia estética de los jardines como espacios de contemplación.
Escucha las reflexiones de la diseñadora Sandy Pérez y uno de los poemas que inspiraron la colección, leído por la diseñadora Nicole Equiza.
Quimera (2022)
PET reciclado y algodón
Tejido de Jacquard
Colección Bi Yuu
En todos sus niveles de producción, desde su conceptualización hasta su materialidad y confección, esta colección para cocina y mesa evidencia el potencial del diseño como herramienta de impacto social y ambiental en un contexto urbano. En colaboración con la industria local, el equipo desarrolló el tejido de Jacquard, utilizando un hilo de algodón recuperado y PET reciclado, generando un material de alta calidad con residuos. La confección está a cargo de Retoño Textil, una fundación que trabaja con mujeres egresadas del sistema penitenciario y que asegura la dignificación del oficio textil. La participación activa y el conocimiento que comparten las confeccionistas ha sido fundamental para el perfeccionamiento de la colección. El diseño está inspirado en el teatro de vanguardia y los patrones del constructivismo ruso. Un homenaje a los rituales de encuentro alrededor de la mesa, el objetivo de Quimera es que el diseño, la belleza, y la calidad sean accesibles a más hogares.
Escucha las reflexiones del equipo de Retoño Textil.